sábado, 31 de enero de 2015

Ajá, tenía que hablar de Miss Universe

Fotografía tomada de http://www.missuniverse.com/

El sueño me vencía y como estoy “luchando” por acostumbrarme a  dormir más temprano, no seguí la transmisión completa de Miss Universo.

Me despedí como tres veces de las redes sociales, porque hacían cada comentario jocoso en Twitter, que no terminaba de desconectarme.

Por fin lo logré y mientras hacía esa reflexión diaria de cómo estuvo mi día y se me cruzaban pensamientos de lo que quería hacer al día siguiente, escuchaba sonidos de la “TV” a lo lejos.

De pronto me despertó la voz de mi hermano Rafa cuando dijo: “Mabel, ganó”. Supongo que imaginó que no me había dormido.

La curiosidad me ganó y terminé encendiendo el celular para echar un vistazo a Twitter y me gocé esos minutos.  Casi crucifican a la representante de Colombia por la respuesta a la primera pregunta. Pocos, de los que leí, salieron a defenderla. Pero señores, todavía muchas estamos pensando una buena respuesta para esa pregunta. No, definitivamente no es fácil.

Pero bueno, ni siquiera es justo que les hagan preguntas frente a medio mundo.  Acaso cuando las entrevistan en privado no es suficiente?  En fin, ya sabemos que esas respuestas no son determinantes.

Como han expresado muchos, una Miss Universo ni nos va a cambiar la vida, ni va a hacer olvidar los problemas que tiene nuestro país (que siempre anda embolatando su realidad con trivialidades), pero tampoco nos hace daño alguno.

Hace un tiempo comenté que no encuentro sentido a los reinados de belleza (por lo de la influencia en jóvenes, sobre lo que es el modelo de belleza a seguir), especialmente si se convierten en excusa para que entidades públicas se bajen del bus con dinero, cuando hay tantas necesidades sociales. Pero ya sé que, por ahora, no se van a acabar.  Son demasiados los intereses económicos que hay detrás de este tipo de eventos.

Pues bien, la nueva Miss Universo, Paulina Vega Dieppa, barranquillera, se ve que tiene una gran personalidad, se ve muy madura y ojalá que encuentre la forma de enviar un mensaje claro y aterrizado a las jóvenes que anteponen la belleza a la salud y la educación, en medio de esa pila de compromisos sociales que le esperan como reina universal de la belleza.

Por lo pronto hay que disfrutar esa visibilidad global que tendremos, en manos de una hermosa joven que seguro nos representará muy bien; dejar de lado los comentarios contra costeños y cachacos, que nada bueno dejan; volver a la realidad de la cotidianidad; aprender a asumir estos eventos como lo que son, unos eventos. Y finalmente, lo más importante, querernos y respetarnos.  No se vale el maltrato y la ofensa.

Aaaahhh, antes que lo olvide: Resulta bastante entretenido seguir algunas transmisiones a través de los comentarios de los tuiteros. Carajo, cómo se la vacilan!

Les dejo este video que está rodando en la web. Es una entrevista que le hicieron a Paulina Vega en un programa de televisión en Estados Unidos.




viernes, 16 de enero de 2015

Sacúdete carnavalero y #PórtateBacano!




Los barranquilleros somos conocidos por la bacanería*.  Eso significa, para quien no sepa, ser personas descomplicadas, que toman la vida con naturalidad, que le buscan el lado amable a los malos ratos, que saben divertirse, que hablan “sabroso” y que aunque la vida sea seria, la hacen divertida.

Esa bacanería no es criticable. Y cómo, quién puede criticar a otro por “saber vivir”! Más bien, muchos querrían ser bacanos y experimentar la bacanería a diario.

Hasta ahí, todo bien, todo bien, como dice nuestro querido “Pibe” Valderrama. El problema es cuando pasamos a la “cha-bacanería”. La definición más clara y sencilla de este último término es: Mal gusto, falta de educación, ordinariez, ausencia de arte. Lo malo es que pasar de la bacanería a la chabacanería es más fácil que anteponer la tres letricas (c h a).

En la vida diaria somos unos bacanes hasta que dejamos de ser buenos ciudadanos y no cuidamos lo nuestro, cuando arrojamos basura a la calle, no respetamos las señales de tránsito, irrespetamos al vecino con música ensordecedora, fumamos en lugares prohibidos, cuando nos olvidamos de la cultura ciudadana.

Vamos a demostrar que realmente somos unos bacanes, que queremos nuestra ciudad y cuidamos nuestras tradiciones. Aceptemos la invitación de Carnaval SA a través de su campaña de cultura ciudadana “Pórtate bacano” hoy y siempre y hagamos de nuestra vida un festejo permanente, seamos alegres y respetuosos, seamos realmente bacanos.

Es fácil. Lo único que debemos hacer es pensar en el bienestar de todos, ponernos en la situación del otro, mirar cómo queremos que sea nuestro entorno dentro de pocos años.  Por lo pronto, en carnaval, acompañemos a los grupos folclóricos y disfraces con aplausos y alegría. No les arrojemos espuma, agua o maicena. Dejemos los lugares limpios y depositemos la basura donde corresponde (no es excusa no encontrar una caneca cerca). Finalmente, respetemos las señales de tránsito: unos segundos hacen la diferencia en cuanto a seguridad y organización.

De chévere…#PórtateBacano!


*Quieren saber algo más de la bacanería? Un vistazo a este video: https://www.youtube.com/watch?v=9QhUd0dD9MA

martes, 6 de enero de 2015

¿Volteamos la página... de vez en cuando?

"Arroparse" con un libro, puede propiciar un buen sueño. Foto tomada de http://blocjoanpi.blogspot.com/


Cada vez que debo revisar un documento kilométrico* en el computador, lo pienso dos veces. Primero, porque sin duda me agota mucho más leer en la pantalla de un computador, que en un texto impreso, y segundo, porque no tengo la posibilidad de rayar la pantalla con mis apuntes.

Tengo claras las ventajas de los documentos y libros impresos, en cuanto a rendimiento (en el tiempo de lectura) y la conveniencia (en cuanto a concentración).  Por eso, a veces dejo de ser “amigable” con el planeta y termino imprimiendo el documento que debo leer, especialmente si tengo la certeza que voy a consultarlo varias veces.

Hoy mi amiga Clara Benitez compartió en su muro de Facebook un artículo sobre las buenas noticias que tienen los científicos para quienes aún queremos seguir leyendo libros de papel, que me hizo sentir un gran alivio sobre mi preferencia por la lectura tradicional. (Ver artículo completo en el enlace http://mic.com/articles/99408/science-has-great-news-for-people-who-read-actual-books**)

Los investigadores explican que la lectura online está haciendo que se pierda la capacidad de leer textos por largos períodos, pues hay demasiada distracción en la lectura virtual (los enlaces y la infografía, por ejemplo). Además, agrego, está la posibilidad y facilidad de suspender la lectura cuando se reciben notificaciones de mensajes en redes sociales, por ejemplo.

El e-reading, trae además un problema bastante serio.  Resulta que cuando leemos en la pantalla de computadores, tabletas y dispositivos móviles, usamos el conocido Patrón de Lectura “F”, que no es más que prestar mayor atención al inicio del texto y luego solo echar un vistazo al resto del texto, de manera vertical.  Con el tiempo,  disminuye la capacidad de concentración y hará más difícil las lecturas largas.

No debemos quedarnos rezagados ante la velocidad con la que se mueve el mundo tecnológico, pero hacer un equilibrio nos beneficiará. Solo por citar algunos, recuerde que leer despacio, sin distracciones, por lo menos unos 30 o 45 minutos al día, disminuye el estrés, aumenta la capacidad de concentración y si es a la hora de ir a la cama, un excelente somnífero (lectura agradable por supuesto).


*Kilométrico: Término popular para referirse a algo que es bastante largo (un recorrido o un escrito, por ejemplo)

**Tomado de http://mic.com/

Lectura recomendada: